Juan Nadie

Título original: Meet John Doe.

País: .

Año: 1941.

Duración: 122 minutos.

Dirección: Frank Capra.

Reparto: Gary Cooper, Barbara Stanwyck, Edward Arnold, Walter Brennan, James Gleason, Ann Doran, Gene Lockhart, Regis Toomey, Spring Byington.

CRÍTICA: La situación actual de nuestro país me lleva a hablar de una película como Juan Nadie. Últimamente pienso que no está demás sacar estos temas, me refiero al de la política y la sociedad. No es una temática que me encandile dentro del mundo del cine, pero parece que no hay más remedio. En mi opinión es necesario ver films políticos que en cierta manera nos abren los ojos más de lo que lo hacen los telediarios de cada tarde. Juan Nadie aborda el periodismo, la voz y el voto del pueblo en un país como Estados Unidos en los años 40. El periodismo (como ahora) estaba controlado por los llamados «peces gordos», y publican lo que a ellos más les conviene y menos perjudica a su imagen para el gobierno. La historia que se relata en Juan Nadie es así, y también acerca de un hombre que pagado por un periódico se hace pasar por un «indignado» con ámbito suicida. Me ha resultado muy interesante lo que se relataba en la cinta así como la manera que tiene el director Frank Capra de enfocarla. Además de política, la película incluye amor, lucha y dudas acerca de la personalidad de uno mismo y su conciencia, es decir, que nos hace recapacitar sobre lo que está bien y lo que está mal desde el punto de vista político. Capra tenía una muy buena forma de hacer este tipo de películas, que nos acaban emocionando por lo moral de su contenido. Ejemplo de ello son algunas de sus obras más famosas, como ¡Qué bello es vivir! y Un gángster para un milagro. Es un director muy de mi agrado, pues siempre que he visto algo de su filmografía me he quedado satisfecho. Curiosamente aún no he visto Arsénico por compasión, uno de sus trabajos más famosos.

Creo que cuando finaliza Juan Nadie acabas teniendo una idea un poco más clara de lo que nos está pasando ahora mismo. En la historia de este film se retrata a un pueblo separado y enfrentado entre sí. Sin embargo, todo va cambiando gradualmente porque se sabe que todos juntos se hace más fuerza que separados, que se puede hacer grandes cosas si entre todos pegamos una voz al gobierno. Es cierto que muchas veces pensamos que el cambio es utópico, pero si no se intenta si que es utópico de verdad. Por eso mismo, aunque como dije no sea un ferviente admirador de la política en el cine, quiero romper una lanza a favor de este tipo de películas que animan a uno a seguir luchando por sus derechos. Juan Nadie obtuvo una nominación al Oscar en 1941 en la ya desaparecida categoría de mejor historia.

Los protagonistas son Gary Cooper y Barbara Stanwyck. Gary Cooper hace una muy buena interpretación en la piel de Juan Nadie. Para mí es el punto de apoyo de la película totalmente. La trama gira en torno a él y no se olvida de que es Gary Cooper, y por lo tanto quien lleva la voz cantante. Se le ha visto en grandes películas que a día de hoy son consideradas verdaderas joyas, como pueden ser Vera Cruz, Ariane, Adiós a las armas y Buffalo Bill. Cooper es además, ganador de dos Premios Oscar de la Academia a mejor actor por su trabajo en Sargento York y Solo ante el peligro. Por otra parte tenemos a la fabulosa Barbara Stanwyck como protagonista femenina de Juan Nadie. Considerada uno de los mitos y mujer fatal del séptimo arte, Stanwyck tuvo una larga y fructuosa carrera cinematográfica, y fue nominada en cuatro ocasiones al Oscar. Finalmente en 1981 se le otorgó la estatuilla en calidad de honorífico. Dicen que su trayectoria estuvo encasillada en el cine negro hasta que Frank Capra la hizo participar en Juan Nadie, cuando demostró que también era muy válida en los géneros de comedia y drama.

Ni que decir tiene que Juan Nadie tiene que ser vista al menos una vez. Nos dará un poco de esperanza en estos tiempos que vivimos. Aparte de su argumento político, disfrutaremos de una película de una bella manufactura y con unos geniales protagonistas dirigidos por el mítico Frank Capra.